¿Tu web está preparada para la nueva Ley de Servicios Digitales (DSA)?
En 2025, la Ley de Servicios Digitales (DSA) entra plenamente en vigor en toda la Unión Europea, y afecta de manera directa a cualquier empresa que tenga presencia en Internet. Si tienes una página corporativa, un ecommerce, una aplicación o prestas servicios online, es fundamental que sepas qué implica esta nueva regulación y cómo cumplirla. En este artículo te explicamos de forma clara todo lo que necesitas saber y cómo adaptarte.
¿Qué es la Ley de Servicios Digitales (DSA)?
La Digital Services Act, conocida como DSA, es una normativa europea que busca regular el ecosistema digital para hacerlo más seguro, transparente y justo. Su objetivo principal es proteger a los usuarios frente a contenidos ilegales, aumentar la responsabilidad de las plataformas digitales y garantizar la transparencia en el comercio electrónico y en los algoritmos que afectan a la visibilidad de los contenidos.
¿A quién afecta la DSA?
La DSA se aplica a todos los intermediarios digitales y plataformas que operan en la UE, desde grandes tecnológicas hasta pequeñas empresas con presencia online. En particular, afecta a:
- Empresas con páginas web corporativas.
- Tiendas online y marketplaces.
- Proveedores de servicios en línea.
- Plataformas que permiten la publicación de contenidos.
Principales obligaciones para webs y ecommerce
Estas son algunas de las obligaciones que establece la DSA y que cualquier sitio web debe tener en cuenta:
- Transparencia en los términos de uso: deben ser claros, comprensibles y accesibles.
- Mecanismos de denuncia: los usuarios deben poder denunciar fácilmente contenidos o productos ilegales.
- Moderación de contenidos: obligación de actuar frente a contenidos ilícitos de forma proactiva y rápida.
- Identificación del proveedor: en ecommerce, debe quedar claro quién es el vendedor real del producto.
- Publicidad más transparente: los anuncios deben estar claramente identificados y se debe informar de los criterios de personalización.
¿Cómo afecta esto a una empresa local?
Si gestionas un ecommerce local o una web corporativa, debes asegurarte de:
- Mostrar claramente los términos y condiciones actualizados.
- Ofrecer un canal de contacto y resolución de incidencias eficaz.
- Evitar reseñas falsas o manipuladas.
- Ser transparente con los algoritmos que determinen el orden de los productos o resultados.
Sanciones por incumplimiento
Las multas por no cumplir la DSA pueden llegar hasta el 6 % de la facturación global anual de la empresa. Además, puede implicar la eliminación de contenido, la suspensión de servicios e incluso el bloqueo del acceso a plataformas en casos graves.
Qué controles debes implementar en tu web
Para estar al día con la normativa, tu web debe incorporar elementos como:
- Política de privacidad clara y visible.
- Identificación del editor de la web.
- Formulario o canal para denunciar contenido sospechoso.
- Registro de las acciones tomadas frente a reportes.
- Auditorías de contenido periódico si gestionas publicaciones o comentarios.
¿Cómo puede ayudarte lynkoo?
En lynkoo ayudamos a empresas como la tuya a adaptar su presencia digital a la nueva normativa europea. Realizamos auditorías legales y técnicas de tu web, adaptamos los textos legales, configuramos formularios de denuncia, revisamos tus procesos de venta online y te asesoramos para que todo tu ecosistema digital cumpla la DSA.
¿Qué tipo de web necesita adaptar más elementos?
Las siguientes plataformas deberán hacer ajustes más profundos:
- Tiendas online con varios proveedores o marketplace.
- Portales de contenidos o noticias con comentarios abiertos.
- Plataformas que integran IA o algoritmos de recomendación.
- Aplicaciones móviles con funcionalidades de comunidad o chat.
DSA y SEO: un impacto indirecto
Las webs que se adapten correctamente a la DSA pueden beneficiarse indirectamente en el posicionamiento en buscadores, al mejorar la confianza del usuario, la experiencia de navegación y la transparencia del sitio, factores cada vez más valorados por algoritmos como los de Google.
La Ley de Servicios Digitales es una oportunidad para mejorar la calidad y fiabilidad de tu sitio web. En lugar de verla como una carga, aprovéchala para reforzar tu imagen y ganar ventaja competitiva.